A veces el, exceso de futuro,
me arruina el presente
y el pensamiento imprudente
me ensucia la mente.
A veces, el pasado,
viene a envenenarme la alegría.
Trata de definirme,
dice que me conocía.
A veces me entrego por un rato y desespero
como si pudiera controlar lo incontrolable,
como si pudiera prevenir lo inevitable,
como si mi intensidad pudiera evitar mi aprendizaje.
Fui terriblemente testarudo
y aunque a veces lo evidente se hace oscuro,
siempre logro llenarme de aire puro
y entiendo que soy quien debo ser.
Entiendo que todo es para ayudarme a crecer,
que la luz que admiro también viene de mi ser.
“Siempre es hoy,
sos parte de mi ser.
Quiero hacer
cosas imposibles”